¿Ha entrado la inteligencia artificial en fase de burbuja? ¿Han logrado los mercados superar los riesgos derivados de la incertidumbre política? ¿Pueden seguir creciendo las economías, o se irá debilitando la tendencia al alza de la economía mundial, como ha ocurrido tantas veces en el pasado?
Estas son las cuestiones que más preocupan a los inversores de cara a 2026. Sin duda, los riesgos están siempre presentes: las valoraciones se han disparado en muchas áreas del mercado, la deuda pública continúa aumentando y la inflación se mantiene. Con todo, la mayor estabilidad del contexto económico ofrece buenas perspectivas a la renta variable en 2026. Además, el liderazgo de los mercados se está ampliando, y ya es posible encontrar oportunidades atractivas más allá de las «siete magníficas» (Alphabet, Amazon, Apple, Meta, Microsoft, NVIDIA y Tesla) en distintas regiones, sectores y capitalizaciones de mercado.
«Estamos pasando de un entorno de mercado binario, en el que las compañías tecnológicas estadounidenses dominaban el mercado, a otro más equilibrado, que ofrece un universo cada vez más amplio de oportunidades de inversión», explica Martin Romo, presidente del consejo y director de inversiones de Capital Group. «Un entorno así exige equilibrio también en las carteras, lo que implica invertir en compañías estadounidenses y no estadounidenses, en crecimiento y valor, en tendencias cíclicas y estructurales. Creo que nunca ha sido más evidente la importancia de la selección activa, respaldada por una exhaustiva labor de análisis», añade Romo.
A continuación, analizamos tres estrategias de inversión que, en nuestra opinión, van a ofrecer oportunidades atractivas el próximo año.
1. Aprovechar el potencial del crecimiento dinámico
En su carrera por el liderazgo en el ámbito de la inteligencia artificial, los gigantes tecnológicos han invertido a un ritmo vertiginoso en las infraestructuras que sustentan la tecnología. Por el camino, sus cotizaciones se han disparado, al igual que lo ha hecho el entusiasmo de los inversores. El fuerte auge que ha experimentado la tecnología ha hecho también que muchos se pregunten si la inteligencia artificial ha entrado ya en territorio de burbuja. Algunos incluso han comparado la situación actual con la burbuja de las puntocom de finales de la década de 1990.
Sin embargo, según Chris Buchbinder, gestor de renta variable, es posible que esta preocupación sea algo exagerada o, al menos, prematura. «Creo que es demasiado pronto para dejar que el riesgo de una posible burbuja no nos permita aprovechar las atractivas oportunidades que ofrece esta nueva tecnología», señala Buchbinder. «Es posible que asistamos a una burbuja en algún momento, pero no creo que hayamos llegado ya a ese punto».
Hay algunas diferencias evidentes entre las compañías que están liderando actualmente el desarrollo de la inteligencia artificial y las pioneras de la era de las puntocom. Para empezar, la cotización de las grandes compañías de inteligencia artificial se ve respaldada por un sólido crecimiento de los beneficio. Además, las empresas que están realizando grandes inversiones relacionadas con la nueva tecnología, como las siete magníficas que hemos mencionado, generan un elevado flujo de caja libre, lo que les permite seguir invirtiendo de manera agresiva durante algún tiempo.